EL ROL DE LOS SISTEMAS DIGITALES EN LAS CIUDADES DEL FUTURO

La conversión de infraestructura urbana en redes para la recopilación de datos, la inteligencia artificial aplicada al tráfico y la ruta que están siguiendo algunas naciones para insertarse en una posición de control creativo y ocupar una lugar estratégico en las redes económicas globales fueron algunos de los temas abordados recientemente por Ricardo Álvarez, investigador en el Senseable City Lab del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), en el marco de la reunión mensual de socios de Desarrollo Industrial de Tijuana (DEITAC).

Para adentrarse en el tema de la tecnología enfocada al servicio de las ciudades y sus ciudadanos, Álvarez habló de un proyecto de reinterpretación de infraestructura pública en el que trabaja actualmente, compartiendo cómo las nuevas tecnologías son capaces de convertir los postes de luz corrientes –epitomes de la infraestructura monofuncional− en redes para la recopilación de datos. “Creemos que los postes pueden pasar de ser fuentes de luz a ser fuentes de conocimiento urbano”, expresó.

De acuerdo con Ricardo Álvarez, los postes de luz inteligentes equipados con cámaras y sensores para tratamientos específicos de información, pueden ser una plataforma para monitorizar lo que está sucediendo en el entorno,  actuar como sistemas de seguridad, controlar el tráfico y hacer más eficiente el estacionamiento de automóviles al enviar información en tiempo real sobre los espacios disponibles.

Esta tecnología de vanguardia es capaz de observar, contar y clasificar a los automóviles, conocer el parque vehicular que pasa por cruces específicos y calcular la proyección de desplazamiento por velocidad y aceleración. También permite saber el volumen de personas que pasa por áreas particulares, sus patrones de movimiento y dirección. Gracias al software es posible recoger una cantidad increíble de datos y extraer de ellos información con la cual se pueda impulsar la productividad.

Así, la tecnología del poste inteligente puede convertirse en la columna vertebral para aportar nuevos servicios de valor.

Ricardo Álvarez, investigador en el Senseable City Lab del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT),

Inteligencia artificial aplicada al tráfico

Otro proyecto estratégico destinado a aumentar el nivel de desarrollo, a través del uso de la tecnología y la innovación, sobre el cual trabaja Ricardo Álvarez son los modelos de semáforos operados con inteligencia artificial, capaces de medir el flujo de autos y peatones en las calles, la velocidad de los vehículos y determinar cuándo es necesario cambiar una luz con tal de hacer más fluido el tráfico y reducir las emisiones contaminantes. Tecnología que permite al semáforo pasar de ser un elemento de señalización de temporización fija a un semáforo semiautónomo, capaz de tomar sus propias decisiones y responder a las condiciones de tráfico cercanas a ellos.

“La información urbana tiene mucho valor, pero apenas estamos aprendiendo a extraerlo”, comentó.

Al hablar de ciudades que se están visualizando no sólo como entidades físicas sino como sistemas operativos citó el caso de Singapur, país que se independizó en los años 60 y desde entonces ha multiplicado 80 veces su Producto Interno Bruto per cápita, es sede regional de más de 5,000 empresas multinacionales y es considerado un país estratégico en las redes económicas globales.

Una razón por la cual se ha visto tal crecimiento en algunos países de Asia, compartió, es porque culturalmente tienen un alto nivel de disciplina social y una gran capacidad de seguir con rigor sus planes estratégicos por décadas.

El siguiente paso para Singapur, comentó Ricardo Álvarez, no sólo es convertirse en la ciudad del futuro sino en un país inteligente e insertarse en una posición de control creativo a nivel global, tras desplegar un considerable número de cámaras y sensores que recogerán y coordinarán una cantidad sin precedentes de datos para mejorar la vida cotidiana en la ciudad, como parte de su programa de Nación Inteligente (Smart Nation).

Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos -EAU-) es otra ciudad, como muchas en el mundo, que están tratando de encontrar cuál va a ser su síntesis urbana en el futuro a través de ejercicios de proyección.

Sostenibilidad, tecnología y ciencia parecen ser los tres pilares sobre los cuales descansa su futuro y el de Masdar City, la ciudad de 6,5 km² que Abu Dhabi está construyendo en el desierto a 20 kilómetros de su capital. Este proyecto es con toda probabilidad la mayor apuesta de urbanismo sostenible a gran escala de todo el planeta, pues está siendo diseñada para ser totalmente ecológica y autosufiente. Resulta paradójico que sea Abu Dhabi, uno de los mayores productores de hidrocarburos del mundo, el que tome la iniciativa de dar un giro a su política energética con miras a un futuro sustentado en las tecnologías limpias, sin petróleo ni emisiones de CO2, replanteando así lo que significa energía más allá del petróleo.

Para concluir hizo énfasis en que esta ola tecnológica va a llegar en algún momento a la región, “la pregunta es ¿ante esta realidad qué va a hacer Tijuana?”